miércoles, 27 de julio de 2011

Un día con Sausalito Woman ´s Club


   Estoy de visita en Sausalito, California, acompañando a la alcaldesa  Virginia Reginato en una visita protocolar debido a que la ciudad de Viña del Mar es ciudad hermana de Sausalito. Para   llegar desde San Francisco, hemos  tomado la autopista  que bordea el mar, cruzado el puente Golden Gate y  bajado por unas empinadas colinas habitadas por residencias típicamente norteamericanas, bellamente mantenidas y rodeadas de hermosos y coloridos jardines hasta llegar al borde costero. La ciudad  es hermosísima,   tiene apenas  7.500 habitantes y   luego de  nuestras reuniones protocolares,  aprovechamos de recorrerla. 

Mientras caminamos  por la calle principal frente a la plaza Viña del Mar,  donde el día anterior hemos asistido a  una ceremonia de conmemoración de los 50 años del hermanamiento de ambas ciudades, vemos como el mar brilla en un día de sol radiante. 

Almorzamos en  el club de yates y luego de un breve paseo por la calle principal llena de tiendas sofisticadas, volvemos a la colina en búsqueda del club de mujeres de la ciudad. Llegamos a una residencia antigua  especialmente construida para esta organización por Julia Morgan la primera mujer en recibir su licencia de arquitecto en California,  en un terreno donado por una de sus fundadoras Grace McGregor.  La casa,  rodeada  de coloridas flores entre las que destacan  las hortensias y liliums  está  decorada con muebles de junco y bella maderas,  reflejando  el  encanto y poesía del  grupo de mujeres del Sausalito Woman ´s  Club que nos da alegremente la bienvenida.

 Este club fundado 1.911 por Elizabeth Shoobert, Lydia Perry y Nellie Story,  tiene como propósito  preservar la belleza de Sausalito,   ayudar a través del esfuerzo organizado a causas sociales y promover los intereses de la ciudad.  Y vaya si lo hacen!, el club al que pertenecen más de 300 mujeres de la comuna, está en todas las causas importantes de la ciudad. Organizan cenas benéficas, desfiles de modas, publican libros de cocina y de historia y juntan fondos para ayudar a los niños más necesitados. Como ellas mismas cuentan con gracia y simpatía, nada ocurre en Sausalito si no cuenta con su aprobación y ayuda.

Tomamos té y comemos exquisiteces mientras ellas nos van contando lo importante que ha sido para sus vidas apoyarse mutuamente formando redes solidarias para ellas, sus familias y para la gente que los rodea. Al despedirme,  junto con agradecerles por la maravillosa tarde que  hemos  pasado juntas, les hablo de Mundo Mujer y de las mutuas coincidencias con Sausalito Woman ´s  Club.  Quedamos en mantener el contacto por correo de modo de  seguir compartiendo nuestras experiencias comunes. Me voy con el espíritu henchido  de estética  y  poesía,   agradeciendo en mi fuero íntimo la capacidad que tenemos las mujeres para embellecer nuestras vidas y las de los de los que nos rodean. 

Macarena Urenda S.