miércoles, 29 de mayo de 2013

Gloria

por Macarena Urenda Salamanca

Debo confesar que todavía no he visto la película. Y no ha sido precisamente por falta de ganas. Pero ha sido tal el revuelo que ha causado que no puedo menos que comentarla en esta columna. 

Hay a mi juicio varias razones para que se haya dado ese fenómeno de tan gran notoriedad. En primer término,  es bueno decir que el cine chileno  está dando que hablar.  Gloria es una película dirigida por Sebastián Lelio y escrita por Gonzalo Maza que fue estrenada el 10 de febrero 2013 en el festival internacional de Berlin. El filme   relata la vida intimista de una mujer que aborda la entrada a una nueva etapa al cumplir sesenta años, buscando el amor tras su separación. Gloria, Paulina García,  quien ganó el oso de Plata a la mejor actuación femenina por el papel, tiene 58 años y está sola en la vida. Para compensar el vacío, llena sus días de actividades y por las noches busca el amor en el mundo de las fiestas para solteros adultos. Esta frágil felicidad en la que vive se altera cuando conoce a Rodolfo ( Sergio Hernández ), un hombre de 65 años, recientemente separado, que se obsesiona con ella. Gloria comienza un romance, pero éste se va complicando   a causa del complejo vínculo de Rodolfo con su anterior familia. Esta relación, a la que Gloria se entrega porque intuye que podría ser la última, acabará por hacerla estrellarse contra la cruel realidad del mundo. 

El director, dice que se inspiró en su madre y en su generación, que considera que no ha sido abordada, ya que hoy día en el mundo, hay una suerte de obsesión con la juventud.

Lelio sostiene que Gloria es un personaje casi universal: «A esa edad se abre ahora un nuevo capítulo, un nuevo episodio de vida. El mundo está lleno de Glorias, no sólo en Chile sino  que también en otros países. La película reivindica los derechos de esa generación a seguir viviendo, bailando, con el convencimiento de que aún queda mucho camino por delante». 

Y es precisamente este tema es lo que me parece más fascinante:   esta película ha sacado  a la luz la vida de muchas mujeres tanto en Chile como en otros países,  que podrían ser Gloria. En efecto, de acuerdo a la encuesta CASEN 2011,   sólo en nuestro país son más de 426.000 las mujeres entre 50 y 60 años que no están casadas ni conviven.  Y esta realidad va en aumento a nivel mundial debido por una parte a que  la expectativa de vida ha crecido especialmente la del género femenino y por otra,  a que son muchas las mujeres que deciden separarse después de los 50 años y vivir una vida  a solas. 

Las razones dicen ellas son muchas:  la autonomía, y el temor de repetir lo que vivieron sus madres,  aguantando  una vida que no les satisfacía por miedo la soledad, al que dirán,  a las penurias económicas. Esto sin embargo ha cambiado para ellas. Según un reciente artículo publicado en el suplemento tendencias de la Tercera “Ellas crecieron escuchando las ideas sobre la emancipación femenina pero al mismo tiempo sus madres les recalcaron la importancia de quedarse en la casa y criar” (La Tercera Tendencia 18 de mayo)  sin embargo ahora que ya ha pasado la época de la crianza se han liberado y han vuelto a resignificar su rol camino a la tercera edad enfocándolo  a guiar sus vidas hacia donde quieren ir. ¡Bien por todas las Glorias de este país!